"La ostia" es el sobrenombre del barrio de la Barceloneta, el marinero, el más típico de la ciudad. Barcelona se ha convertido en un destino turístico de primer orden y la Barceloneta es el primer barrio en notar esos cambios: aumento espectacular del precio de la vivienda, casas que se transforman en apartamentos para turistas y reformas urbanísticas que han suscitado polémica. Los vecinos, en su mayoría ancianos, sienten que nadie cuenta con ellos porque como dicen "la Barceloneta aspira a convertirse en la Miami de Europa".